En el siglo XIX, la clase terrateniente promovió las carreras de caballos, los partidos de hurling y críquet y las pruebas de atletismo. En las competiciones oficiales no podían participar ni los artesanos ni los obreros.

Abril de 1880
Animado por Pat Nally, de Mayo, Michael Cusack organizó una competición de atletismo abierta a todos los deportistas, sin importar su clase social.

Octubre de 1881
Cusack escribió una serie de artículos en el periódico deportivo Irish Sportsman en los que pedía la inclusión de nacionalistas en los órganos de gobierno del deporte irlandés.

Diciembre de 1883
Tras la disolución del Dublin Hurling Club después de tan solo doce meses, Cusack fundó el Metropolitan Hurling Club. Su éxito le convenció de que el hurling podía reactivarse a escala nacional.

Domingo de Pascua, 13 de abril de 1884
Un partido de hurling entre el Metropolitans y el Killimor (Galway) convenció a Cusack de que para garantizar la reactivación del hurling a nivel nacional eran necesarias unas reglas tipificadas y un órgano rector.

Agosto-octubre de 1884
Cusack escribió a Maurice Davin buscando apoyo para una organización nacional para promocionar el hurling. Un artículo escrito por Cusack en el periódico The Nation pedía la reactivación de los pasatiempos nacionales de Irlanda regidos por el pueblo irlandés.